El término linkbuilding sigue usándose para hacer referencia al aumento de la visibilidad de las páginas web en los buscadores. Sin embargo, a este respecto, entran en juego otras medidas de SEO (lee el siguiente apartado: El linkbuilding como factor SEO). Las tentativas para crear backlinks reciben el nombre de linkbait (traducido sería “cebo de enlaces”) y estas se engloban en el llamado linkmarketing. El objetivo básico es, en este caso, que aumente la popularidad de los enlaces y de los dominios de las propias páginas web, popularidad que surge de la cantidad y de la calidad de los enlaces entrantes. Desde el punto de vista cuantitativo, se evalúa todo aquel enlace (popularidad de los enlaces) o cada página web (popularidad de los dominios) que haga referencia a la página web objeto del análisis. La calidad del enlace estará sujeta a unos valores de medición determinados de las páginas web que crean dichos enlaces (como por ejemplo, TrustRank, el algoritmo Hilltop, etc.).
Para llevar a cabo la evaluación de los enlaces (y asimismo de las páginas web en su totalidad), los buscadores hacen uso de los conocidos webcrawlers (también conocidos como rastreadores, robots o arañas), que escanean las páginas web y las valoran teniendo en cuenta determinadas características. El poder de un enlace recibe el nombre de link juice o link power y este se transmitirá a las páginas conectadas a ellos. El principio que hay detrás de este fenómeno suele compararse con un río del que emergen grandes afluentes. De la misma manera, el link juice de una página web fluye por todas las páginas enlazadas a ella y les distribuye el poder de los enlaces de la página de origen uniformemente. Por lo tanto, esto significa que cuantas más páginas web se enlacen, menor será el link power que recibirá cada una de ellas por separado.
Debido a que el link juice de otras páginas web se puede utilizar en una página propia, deben priorizarse aquellas páginas cuyo posicionamiento en los buscadores tiene que aumentar y que, como consecuencia, están provistas de backlinks. En el mejor de los casos, el enlace entrante proviene de una página web que, según el buscador, es de alta calidad. Adicionalmente, la técnica de la construcción de enlaces también contiene medidas que no solo resultan prometedoras para Google y otros metabuscadores, sino que tienen la capacidad de aumentar el número de visitas de una página web de manera inmediata. Así, algunos usuarios pueden hacer uso de un enlace externo para acceder por primera vez a la página web enlazada. Sin embargo, si el contenido que aparece en ella consigue llamar su atención, lo más probable es que el usuario la guarde entre sus favoritos o que, en el mejor de los casos, vuelva a visitarla. Las posibilidades de adquirir nuevos visitantes se amplían cuando la página web que crea los enlaces tiene un grado de popularidad considerable y/o cuya orientación temática posee ciertos puntos de conexión con los contenidos de los backlinks.