En las versiones de Outlook que todavía cuentan con la interfaz clásica con menús desplegables, procede de la siguiente manera:
Paso 1. En el menú “Acciones”, selecciona “Correo electrónico no deseado” > “Opciones de correo electrónico no deseado”.
Paso 2. En la siguiente ventana, en la pestaña “Opciones”, ajusta el filtro de spam a “Bajo” o “Alto”. Una vez más, prueba durante unos días para saber qué opción prefieres. Comprueba regularmente la carpeta de correo no deseado en el futuro próximo: si hay demasiados correos electrónicos “normales”, ajusta el filtro de spam de Outlook a “Bajo”. Si, por el contrario, tu bandeja de entrada está inundada de molesto spam, cambia a “Alta”.
La opción “Solo remitentes y destinatarios seguros” es, como en las nuevas versiones de Outlook, poco práctica para la mayoría de los usuarios. Primero tendrías que introducir manualmente todas las posibles direcciones de correo electrónico de los remitentes deseados en una lista de remitentes seguros.
Paso 3. En la lista de “Remitentes bloqueados” puedes ver todos los remitentes que ya han sido bloqueados. También puedes volver a eliminar de la lista de remitentes bloqueados las direcciones de correo electrónico incluidas, haciendo clic en el botón “Quitar”.
Paso 4. Gracias a la pestaña “Internacional”, estas versiones de Outlook también te permiten catalogar automáticamente como spam los dominios de determinados países. Si tu empresa está especializada, p. ej., en el mantenimiento de máquinas en la comunidad de Madrid, es poco probable que recibas una consulta por correo electrónico desde Vanuatu y que no sea spam.
Paso 5. Siun correo electrónico no deseado no es reconocido automáticamente como tal por el filtro de spam de Outlook y acaba en la bandeja de entrada, haz clic con el botón derecho del ratón y selecciona “Correo no deseado” > “Añadir el remitente a la lista de remitentes bloqueados” en el menú contextual. Esto significa que en el futuro todos los correos electrónicos de este remitente irán directamente a la carpeta de spam.
Paso 6. Los correos electrónicos no deseados se archivan en la carpeta “Correo electrónico no deseado” de la cuenta de correo electrónico correspondiente. Deberías comprobar regularmente que ningún correo electrónico interesante haya terminado en esta carpeta.
Paso 7. Si un correo electrónico se detecta erróneamente como spam, haz clic con el botón derecho del ratón y selecciona “Correo no deseado” > “Añadir remitente a la lista de remitentes seguros” en el menú contextual para que los correos electrónicos de este remitente dejen de filtrarse como spam en el futuro.