Después de subir tu vídeo a YouTube, es importante que te asegures de que los usuarios puedan encontrar y reproducir tu vídeo. Por un lado, las ya mencionadas etiquetas, títulos y descripciones ya son una ayuda en este aspecto. Pero, por otro lado, la difusión también es crucial.
Utiliza tu página web para insertar el vídeo en HTML, comparte el vídeo a través de tus canales de redes sociales, establece una marca de tiempo para las publicaciones especialmente importantes y mantén tu canal siempre actualizado.
En algunas situaciones, puede bastar con una imagen de canal adecuada, un patrocinador de YouTube o con el nombre del canal para atraer visitantes. Sobre todo en el caso del título, es importante que le dediques tiempo y lo elijas bien para que, en la medida de lo posible, sea fácil de recordar. Pero incluso si no se te ocurre inmediatamente una buena idea, no pasa nada. El canal te permite cambiar el nombre YouTube en cualquier momento.