Todos los servidores de correo electrónico intentan bloquear los correos con un remitente falso. Los estafadores simulan direcciones de remitentes de confianza y conocidos por el receptor para colar, por ejemplo, un virus troyano o para convencer al receptor a facilitar información sensible (phishing).
Uno de los métodos para comprobar la autenticidad del remitente es DKIM, un concepto con el cual se verifican los correos con firma digital. DKIM es el acrónimo de DomainKeys Identified Mail.
El DKIM que se usa hoy en día se creó en el año 2004 como un proyecto colaborativo de un consorcio de empresas. DKIM reúne los conceptos antiguos del DomainKeys de Yahoo y el Identified Internet Mail de Cisco y de aquí se tomaron precisamente las siglas DKIM: DK = DomainKeys, IM = Identified Internet Mail.