La victoria de Costeja fue celebrada por la comunidad online a nivel mundial. Sin embargo, la sentencia se ha enfrentado a un gran inconveniente: Google solo se vio obligado a eliminar los enlaces que conducían a páginas web en Europa. Así, quien introdujera el nombre de Costeja en Google.com o en algún otro país fuera de Europa, seguía encontrándose con el enlace a La Vanguardia y, por lo tanto, con la famosa lista. Para muchos defensores de la privacidad en Internet, incluyendo la autoridad francesa CNIL (Comisión Nacional Francesa de Informática), esto no fue suficiente.
Finalmente, Google accedió a eliminar los enlaces. Desde marzo de 2016, todos los resultados que hayan sido borrados de las SERP no podrán encontrarse en páginas web internacionales cuando la búsqueda se realiza desde el país de la persona que ha solicitado la eliminación de la información. Así, si algún español pide la eliminación de datos personales de Google, es posible que, si realiza la búsqueda a través de Google.com, los siga encontrando en Francia.
No sintiéndose conforme con la decisión, CNIL le impuso una sanción de 100.000 euros a Google Inc.. Como respuesta, el gigante de los buscadores acudió al tribunal administrativo más importante de Francia. “Ningún país debería crear leyes para otros países”, dijo el abogado de Google David Price. La decisión final se tomará a principios de 2017.
Bing, el buscador de Microsoft, también ha estado aplicando el derecho al olvido conforme a las directrices de Google. Para ello, estos motores de búsqueda utilizan señales de localización como, por ejemplo, direcciones IP. Estos cambios también aplican a solicitudes hechas en el pasado.