El tamaño de la página web, es decir, el tamaño del archivo que contiene todos los elementos de una página web, influye en la rapidez con que se transfiere y visualiza la misma. Los tiempos de carga más cortos reducen la tasa de rebote, por ejemplo, porque las visitas ven el contenido de una página web inmediatamente. En este artículo te ofrecemos una breve introducción sobre cómo puedes optimizar tu proyecto web.

Reducir el código fuente de la página web

Asegúrate de optimizar o reducir al máximo el código fuente de tu web, por ejemplo HTML, CSS o JavaScript.

La forma más sencilla de reducir el código fuente es utilizar una herramienta online, por ejemplo, Minifier, a la que puedes acceder a través del siguiente enlace: minifier.org.

También puedes encontrar más información estos artículos de nuestra guía digital: 

 Comprimir CSS y mejorar el rendimiento

Optimización de páginas web: cómo hacer WordPress más rápido

Nuestro consejo

Haz siempre una copia de seguridad de tus archivos antes de editar el código fuente. De este modo, podrás volver a disponer rápidamente de una versión funcional de tu web en caso de problemas y errores.

Otras opciones de optimización

  • Archivos de imagen y vídeo: reduce la resolución de fotos, gráficos y vídeos.
  • Plugins: elimina del sistema de gestión de contenidos los que no utilices o sean superfluos.
  • Compresión de páginas web: utiliza métodos de compresión como GZIP o Brotli.