
La mayor parte de las páginas web incluyen una gran cantidad de fotos, gráficos y animaciones, lo que suele afectar al rendimiento. Una técnica a la que se recurre con frecuencia para evitar este problema es la compresión de los archivos de imagen. Con WebP, Google ha desarrollado un formato que toma la delantera a JPEG, PNG, GIF, entre otros, aunque, hasta el momento, su papel ha sido secundario...